La realidad es que una ruptura provoca un conflicto cerebral que hace imborrable un recuerdo, y de hecho cuanto más -tanto en tiempo como intensidad- se ha vivido dentro de la pareja, los recuerdos se fijan con muchísima mas fuerza dentro del cerebro, ocasionando que se disparen fácilmente, ya que cuanto más información grabamos mas vívidos son los recuerdos....
Seguramente muchos se han cruzado con una ex pareja y automáticamente se desataron una cantidad inmensa de recuerdos, de momentos y vivencias. Según Ezequiel Gleichgerrcht, neurobiólogo del Instituto de Neurología Cognitiva (INECO), y citando la teoría de otro prestigioso investigador, Antonio Damasio, explica que estos recuerdos son una respuesta química al "estímulo"....
Un ejemplo sencillo sería que camináramos por un campo y nos cruzáramos con una víbora que abre la boca e intenta atacarnos, esta situación desataría un conjunto de reacciones químicas que se asociarán con el miedo y el instinto de supervivencia, si otro día nos cruzamos con otra víbora, aunque esta no dé señales de atacarnos, desataremos involuntariamente la misma reacción...
¿El tiempo mata al amor? Para los que afirman que el tiempo lo cura todo, deben saber que también la ciencia se ha dedicado a buscar una explicación: con el tiempo los neurotransmisores asociados a situaciones críticas se saturan debido a la acumulación, lo que puede producir lo que se denomina como "down regulation", es decir una disminución en los neurotransmisores; lo cual explicaría por qué los recuerdos van perdiendo fuerza a medida que pasa el tiempo...
Básicamente el cerebro no puede almacenar y poner en primer plano recuerdos toda la vida, ya que se van generando nuevos, que empujan a los otros hacia abajo, claro que esto conlleva un proceso, totalmente involuntario y que es imposible controlar cuando se habla de una situación critica.
Amor: ¿Sentimiento o Ciencia?Parece ser, entonces, que todo lo que corresponde al amor, tiene una base lógica y empirica. Seguramente algunos preferirán la verdad romantica y otros serán más fríos y calculadores en ese sentido; pero lo que guardan en común, es que todos han vivido la experiencia de un recuerdo grabado a fuego...
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